La voz universal

Al leer este poemario de María Carretero, es inevitable retrotraernos al surrealismo lorquiano en su etapa más bulliciosa y creativa. Su huella sigue ahí, elocuente y viva, y la traslada a nuestros días con la frescura de unos versos a los que les impregna una ecléctica sonoridad hasta conseguir hacer un todo que reverbera en nuestras manos, mientras disfrutamos de su acogedora lectura.

María logra llevar al lector la única voz que se puede llamar universal, un rico lenguaje que no necesita palabras porque camina sobre los sentidos. Su visión pragmática de la propia vida y sus congéneres nos invita a descubrir la parte más frugal de la interacción que nace del conocimiento mutuo del ser humano.

Con esta obra, la autora se abre al mundo con un claro objetivo: “Cuando estamos juntos conversamos, el lenguaje universal de los antiguos astros…” reza en uno de sus poemas más significativos. Con la necesidad firme y decidida de cubrir ese vacío existencial entre dos almas encontradas con puentes de versos que anhelan cruzar la más poderosa de las pasiones: el amor.