Cuentos y leyendas de la villa de Tolox

Cuando de niño, mis padres me llevaron a Tolox seguro que nunca pensaron el amor que nacería en mí, hacia esta bellísima localidad y sus gentes.
Como a muchos, me llevaron en calidad de “agüista”, es decir, como paciente del balneario y es que yo tenía los pulmones como unos zorros; mi afección era tal, que no podía dormir tendido y me pasaba las largas noches durmiendo sentado en la cama. Aquella enfermedad, la bronquitis asmática, hizo que me marcara y mi vida no fuera como la de cualquier otro niño. Faltaba con frecuencia al colegio y no podía jugar con mis amigos, por lo que la actividad de mi vida infantil se limitaba, en muchas ocasiones, a leer, a dibujar, a escribir, a mirar por la ventana de mi casa para ver cómo otros niños jugaban a la pelota en la calle, e incluso a aprender de mi madre y abuela los secretos culinarios que se me descubrían cada día a la hora de los fogones, y eso, entre crisis y crisis asmáticas.
A mis padres les hablaron de las bondades del balneario de Tolox y sin pensárselo dos veces, con un gran sacrificio económico, me llevaron a este bello pueblo, y ante la imposibilidad de quedarse conmigo, cosa que les hubiera encantado, tras hablar con el cura del pueblo, me dejaron bajo su tutela. Este cura párroco era don José Carretero, (q.e.p.d.) del que guardo un especial recuerdo y cariño. No sé qué requisitos se necesitarán para llegar a ser santo, pero don José, seguro que ahora anda en el cielo sobrado de estos menesteres.
Aquella curiosa tutela era compartida con María Victoria Millán Ruiz, la propietaria de la Fonda Fernández Millán, en la Plaza de los Poyos. ¿Quién me iba a decir que con el tiempo llegaríamos a ser familia?
Pasaron los años y yo, un joven ya recuperado totalmente de tan dura afección, seguía yendo al pueblo, ahora sano y sin tutelas, pero el ir a Tolox, aunque fueran aquellos quince días, era algo que me daba la vida. Siempre seguí cumpliendo con mi cita anual con Tolox y más cuando me casé con la que hoy, después de “chiquicientos” años, sigue siendo mi esposa, sobrina de María Victoria y con raíces en el pueblo. Ya casados, también íbamos con nuestros hijos, ahora teníamos allí, además, grandes amigos, Juani y Paco Vera Gil, del restaurante la Alberca; Pili, Amparo y Ana Belén del museo; Bartolomé Guerra Gil, el alcalde; Damián del antiguo bar de la plaza; Roque (conductor de autobuses Portillo) y su encantadora esposa Carmen; Virgilio el incombustible cronista; Higinio de la farmacia; Antonio Marmolejo Canca; Antonio de Tolox, célebre cantaor de buen flamenco; la familia Ballesteros, los Fernández Villamor; al pintor Pachi Gallardo; el incansable Antonio Zayas; mi admirado Juan Jesús Vera Guerra y un largo listado de amigos, y tal vez por todo eso, por esa querencia, yo siempre he presumido de ser de Tolox, aunque no de nacimiento.
Mi suegro, José Millán Ruiz, me enseñó a querer aún más a esta bellísima villa, y no había una “cohetá” por San Roque o cualquier otra celebración a la que no asistiéramos.
En fin, creo que le debo mucho a Tolox y pensaba que le debía el escribir este libro, el cual espero que os guste o por lo menos sea ameno.
Las historias que cuento, algunas son ciertas y otras las escuché en alguna ocasión, y como leyendas o quizás chascarrillos populares yo las he adaptado haciéndolas del pueblo.
Algunas de ellas ya fueron publicadas en otro de mis libros anteriores, titulado “Historias y chascarrillos malagueños” y consiguieron bastante éxito.
Solo espero hacer entretenida su lectura y si provoco alguna sonrisa, mejor que mejor.

Diego Ceano

Escritor
Materia
Historia
Idioma
  • Castellano
EAN
9788412096149
ISBN
978-84-120961-4-9
Depósito legal
MA-1601-2019
Páginas
124
Ancho
15 cm
Alto
22 cm
Edición
1
Fecha publicación
23-02-2019
Papel
12,00 €

Sobre Diego Ceano González (Escritor)

  • Diego Ceano González
    Escritor costumbrista con 43 libros publicados en la actualidad. Es presidente de la Academia Malagueña de las Artes y las Letras “Sta. Mª de la Victoria”, ha sido Vicepresidente y Académico de Número del Área de Literatura en la Academia Malagueña de Ciencias y Humanidades de Sa... Ver más sobre el autor

Libros relacionados